Las cuatro entradas
Poema de los puntos cardinales internos
Si me buscas,
toca mi puerta del Este,
donde el amanecer es lúcido,
y la claridad enciende la frente.
No vengas, en invierno,
a mi Norte:
allí lo íntimo se pliega,
como un brote en la escarcha.
En el Sur, pleno y cálido,
no hallarás rendición dócil;
una cerradura protege su entrada,
la llave la custodia una mujer sabia.
Y en el Oeste,
mi umbral más hondo,
no hay cántaros de agua,
ni sillas para el viajero ocasional:
ese portal se abre,
solo a lo sagrado y propio.
✦ Meditación poética:
Imagínate en el centro de una brújula interior:
- Este (social): visualiza un amanecer dorado que ilumina tu rostro; siente la apertura a los vínculos y a mostrar tu presencia.
- Norte (intimidad y soledad): contempla un paisaje invernal donde todo se repliega hacia dentro; siente allí tu refugio secreto, tu semilla intacta.
- Sur (compartir): percibe un sol pleno que calienta; coloca en él tu capacidad de nutrir y recibir.
- Oeste (madurez del alma): imagina un crepúsculo profundo que abre un portal sagrado; allí se guardan tus aprendizajes y la sabiduría de tu experiencia.
Permanece unos instantes respirando en el centro, percibiendo que las cuatro direcciones te habitan. Deja que tu intuición te muestre cuál de estas fuerzas pide hoy expresarse en tu vida.
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