Estación suspendida

He tenido que volver, en servicio, demasiadas veces
a un cuerpo que no descansa.
Presagio de tristezas antiguas,
lejía,
y de todo lo que tememos que suceda;

No te alcanza

Primero fue el sonido:
la noria chirriando en lo alto,
los gritos suben, pintan el azul de rojo.